Tendinitis del supraespinoso, de la lesión al rendimiento

La tendinitis o tendinopatía del supraespinoso es una condición dolorosa que afecta al tendón del músculo supraespinoso, que forma parte del manguito rotador. El manguito rotador a su vez, es un grupo de cuatro músculos y sus correspondientes tendones que estabilizan y proporcionan movilidad al hombro. Este tendón es crucial para la estabilidad y el movimiento del hombro, y la lesión puede ser causada por el sobreuso, por lesiones agudas o crónicas, o factores biomecánicos anormales o alterados. 

¿Cómo se produce esta lesión?

Es una lesión que afecta tanto a deportistas como a la población general, debido a las características especiales de esta región anatómica que le predisponen a sufrir en tareas y movimientos como los siguientes:

  • Con trabajos donde se levantan objetos pesados por encima de la cabeza o  que implican realizar movimientos repetitivos, como la pintura, la limpieza, la construcción o trabajos de almacén. 
  • En deportes que implican movimientos repetitivos del hombro, como el pádel, el tenis, el crossfit, o el voleibol.
  • Actividades cotidianas que implican movimientos del hombro, como limpiar ventanas, pintar paredes o llevar objetos pesados de manera incorrecta.

¿Qué síntomas son propios de la tendinitis del supraespinoso?

  • Dolor en la parte delantera y lateral del hombro.
  • Dificultad y dolor para mover el brazo, especialmente levantarlo por encima de la cabeza.
  • Dolor que empeora por la noche o durante actividades que implican movimientos del hombro.

¿Qué factores llevan a sufrir la lesión de tendenitis del supraespinoso?

  • Sobrecarga repetitiva por actividades que implican movimientos repetitivos del hombro.
  • Posturas inadecuadas. El tendón discurre por un estrecho espacio entre el hueso acromion y la cabeza del húmero, denominado espacio subacromial. Mantener una postura incorrecta durante la realización de tareas diarias o deportivas puede llevar a modificar la alineación de nuestra columna y articulaciones, que a su vez pueden provocar descompensaciones musculares que contribuyan a la degeneración del tendón del supraespinoso en su paso por este espacio subacromial.
  • Edad: A medida que envejecemos, la probabilidad de que el tendón se degenere es mayor y, por ende, la probabilidad de que reproduzca dolor en el hombro aumenta. Es una lesión que puede ser muy común a partir de los 40 años.

Y, ¿Cómo podemos tratar la lesión?

Una de las primeras intervenciones consiste en la reducción de la actividad que contribuye al dolor y la aplicación de hielo, así como el tratamiento fisioterapéutico, dónde lo más importante va a ser la realización de un protocolo guiado de ejercicio terapéutico enfocado al hombro y a los factores contribuyentes de la lesión. Este plan de tratamiento debe estar supervisado por un fisioterapeuta especializado en ejercicio, ya que los estudios corroboran que el uso de programas de ejercicio terapéutico en el tratamiento de la tendinitis del supraespinoso ayudan a reducir el dolor, mejorar la función del hombro y, sobre todo, prevenir recaídas

Algunos estudios han comparado la efectividad de los programas de ejercicio supervisados por un fisioterapeuta con los programas no supervisados o autoguiados. La evidencia sugiere que los programas supervisados son más efectivos para mejorar los resultados a corto y largo plazo en pacientes con tendinitis del supraespinoso, ya que permiten una mejor adaptación del programa de ejercicio a las necesidades individuales de cada paciente y una mayor adherencia al tratamiento.

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